
Por: Luis Ángel Saavedra[1]
24 julio 2025
El Congreso de la CONAIE se presentó como un punto de inflexión para esta estructura del movimiento indígena, previéndose que habría una alta confrontación a su interior, lo que podría derivar actos de violencia, especialmente si el candidato a la reelección veía truncadas sus aspiraciones.
Se dieron debates intensos, con acusaciones fuertes, pero no hubo violencia ni hechos cuestionables, salvo quizá un intento de abandono del Congreso por parte de Fernando Guamán, candidato a la presidencia de la CONAIE y claramente vinculado al gobierno de Daniel Noboa, cuando se sintió increpado por Leónidas Iza, el candidato a la reelección.
Los análisis previos a este Congreso indicaban que, por primera vez, el gobierno disputaba este espacio a través de 3 candidaturas abiertamente identificadas con Daniel Noboa. En ocasiones anteriores, los gobiernos habían mostrado interés en cooptar la CONAIE, pero no se habían presentado de frente, poniendo a sus públicos coidearios en la contienda.
Por otra parte, estaba la continuidad del trabajo realizado en la CONAIE, con la reelección de Leónidas IZA. También se hablaba de la candidatura de Zenaida Yasacama, que podría ser una alternativa de continuidad. El informe de su gestión como vicepresidenta saliente de la CONAIE la posicionó con fuerza y Leónidas Iza se refirió a Ella en varias ocasiones de su intervención, resaltando su compromiso con la organización y su coherencia política en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
Completó el cuadro de candidaturas el achuar amazónico Marlon Vargas, que se presentó con amplias opciones para ganar la contienda. Vargas esbozó un discurso de unidad, manteniendo una posición de neutralidad y silencio durante los debates más ásperos del Congreso. La unidad fue el discurso más recurrente por parte de quienes se sintieron cuestionados durante este Congreso.
La reelección ocultó debates trascendentes
El tema de la reelección propició un escenario en el que se procuró encuadrar todos los debates; sin embargo, al margen de esto habría que preguntarse qué es lo que realmente está en juego con la modificación de los estatutos de la CONAIE. Esto lo explicó Leónidas Iza.
El gobierno, aupados en medios de comunicación y redes digitales, enfatizaron la posibilidad de la reelección de Leónidas Iza y se le acusó de proponer un cambio de último momento para permitir su reelección. Un análisis más profundo del proceso de modificación del estatuto y los cambios propuestos nos muestra que esta propuesta puede molestar tanto al gobierno como a una serie de personajes y grandes ONGs que trabajan con el movimiento indígena.
El primer punto, que involucra al gobierno y sus instituciones, pone en debate el tema de la autodeterminación de los pueblos indígenas. El Estatuto presenta la posibilidad de que sean las estructuras indígenas las que tengan la potestad de reconocer los nombramientos, de autoridades indígenas, aprobar estatutos o reconocer la creación de nuevas organizaciones y comunidades, en el marco de lo establecido en la Constitución del Ecuador y aportando en la paulatina construcción del Estado Plurinacional. Esto significa una disputa de poder.
Según los estatutos modificados, esta potestad asumiría el movimiento indígena a través de sus diferentes estructuras, quitando esta facultad a la Secretaría de Pueblos, pues en esa institución pesa la costumbre de aprobar nombramientos de autoridades indígenas o de sus organizaciones de acuerdo con su identificación con las tesis gubernamentales. Por esa razón Marco Guatemal, principal de la anterior Secretaría de los Pueblos, se negó a reconocer los cambios estatutarios presentados por la CONAIE que, hace más de un año, fueron aprobados en asambleas y consejos ampliados. En la Secretaría de Pueblos está el origen del conflicto por la reelección, punto que también consta en las modificaciones presentadas. Si la Secretaría de Pueblos hubiese registrado las modificaciones solicitadas por la CONAIE, no habría conflicto por la reelección y, sin conflicto, se eliminaba la manipulación mediática sobre este tema.
La autodeterminación reconocida en los nuevos estatutos da la posibilidad de que se siga construyendo el Estado Plurinacional y que la institucionalidad indigna se fortalezca, algo que, sin lugar a duda, estorbaría a todo gobierno, más aún a gobiernos como el de Daniel Noboa, empeñado en eliminar la mayoría de los derechos que cobijan a los pueblos indígenas y a la naturaleza.
¿Estatutos en contra de las grandes ONGs?
Otro tema que contemplan los estatutos modificados es la creación una estructura plurinacional en todos los ámbitos que involucran a los pueblos indígenas, entre ellos, una nueva arquitectura económica para el manejo de los recursos de sus territorios y la cooperación internacional.
En este momento, las agencias de cooperación internacional tienen libre potestad para realizar convenios y establecer alianzas con las comunidades o con los pueblos que ellos consideran convenientes para sus intereses o en las agendas que se ponen de moda en el espectro internacional, para lo que estas agencias tienen poder para poner de moda a pueblos y personajes que les son funcionales.
Esto ha provocado una serie de asimetrías entre las comunidades y los pueblos. Hay comunidades muy pequeñas, sin contacto, sin capacidad de gestión, que no logran acceder a la cooperación internacional. En cambio, hay otras comunidades y otros pueblos que se han convertido en punta de lanza de estos financiamientos y que son llevados de la mano a diferentes foros y eventos en donde se determinan las políticas de los pueblos indígenas.
Existen grandes fondos económicos relacionados con el cambio climático. Estamos hablando de cientos de millones de dólares a los que las grandes agencias de cooperación internacional están interesadas en acceder y para ello necesitan alianzas con las organizaciones de los pueblos indígenas. Las comunidades, por su parte, no pueden acceder de forma directa a estos fondos, por lo que también necesitan estas alianzas; pero, son alianzas que se las hace de forma precaria y sin que las comunidades tengan capacidad de monitoreo o realizar auditorías técnicas sobre los montos y destino de estos grandes fondos.
Las modificaciones propuestas en el nuevo estatuto de la CONAIE plantean consolidar una sola estructura económica en la que se coordinen todos los apoyos de la cooperación internacional y otros fondos. En el marco de esta estructura, se puede dividir la cooperación entre todas las comunidades, eliminando las asimetrías o preferencias que pueda tener la cooperación con determinadas organizaciones, comunidades o pueblos indígenas. Un ejemplo de estas asimetrías en el Congreso de la CONAIE fue mirar como un pueblo indígena amazónico, con dos votos acreditados, llegó al congreso con 50 personas a las que una ONG las alojó en un hotel 5 estrellas de la capital, en tanto que el resto de las delegaciones dormían en carpas instaladas en el sitio del Congreso. Es totalmente legítimo que las comunidades tengan una buena atención y es bueno que 50 personas de una comunidad hayan llegado a un hotel 5 estrellas, pero la atención recibida por esta comunidad despierta suspicacias.
El gobierno se opone a dar más poder y más autonomía a las comunidades, pueblos y nacionalidades indígenas en el marco de un estado plurinacional, pero con la nueva arquitectura económica propuesta por la CONAIE, a la oposición gubernamental se suman grandes organizaciones ambientalistas que se sienten amenazadas.
Otro aspecto de las modificaciones aprobadas en el nuevo estatuto tiene que ver con la estructura administrativa de la CONAIE, que tiene la finalidad de retomar la confianza de la cooperación y prepararse para manejar la estructura económica propuesta, pues consolidar este fondo plurinacional para la cooperación implica tener un sistema de administración financiera sólido, con procedimientos claros y un control eficaz del flujo de dinero. Con los cambios en el estatuto se impide que las directivas usen libremente los recursos, sino que lo hagan bajo un plan programado y aprobado por las comunidades.
En el pasado, la CONAIE ha tenido problemas administrativos y muchos de los cooperantes han retirado su apoyo porque no se ha brindado las garantías suficientes para un buen manejo financiero. Estos cambios han sido ya implementados y hoy, por primera vez, el traspaso de mando se lo hará con una auditoría integral del manejo que llevó adelante Leónidas Iza.
Todos estos cambios que buscan la solidez política y administrativa de la CONAIE fueron ocultados con la polémica generada alrededor de la reelección, que también consta entre los cambios aprobados hace un año, pero que ahora se la presentó como una manipulación. Habría que preguntarse sobre la verdadera razón por la que los medios de comunicación tradicionales y muchos trolls de redes sociales estuvieron interesados en construir un imaginario social distante de todo el debate que llevó a la aprobación de los estatutos y centrarse únicamente en la supuesta manipulación que intentaba Leónidas Iza.
¿Votaciones favorables a Leónidas Iza?
La propuesta que se presentó para su aprobación en el Congreso de la CONAIE pedía que se ratifique el estatuto, no que se aprueben los cambios porque estos ya fueron aprobados hace un año y no fueron aceptados por la Secretaría de Pueblos. En concreto, lo que se votó fue ratificar los estatutos y obligar a la Secretaría de los Pueblos a registrarlos.
Esta votación constituía la primera prueba de fuego para Leónidas Iza. La sorpresa fue que no se registró un solo voto en contra de la ratificación de los estatutos modificados, pues cuando se preguntó sobre quienes estaban de acuerdo con esta ratificación, fue evidente una mayoría absoluta, pero cuando se preguntó sobre quienes se oponían, nadie emitió su voto. Al no haber votación en contra, se asumió que la votación fue unánime a favor de la ratificación de los nuevos estatutos, y con ello se habría la puerta para la reelección.
Esta votación obligó a las candidaturas gobiernistas a revaluar su posición y pensar en sí era necesario presentarse con tres candidaturas o tendrían mejores opciones aglutinándose alrededor de una sola. Optaron por una sola candidatura, pero la pregunta seguía ¿alrededor de quién? Mientras tanto, Marlos Vargas, con su discurso conciliador, había empezado a aglutinar fuerzas en comunidades de la sierra.
El segundo debate polémico se dio con la propuesta de expulsión a los seis asambleístas de Pachakutik que se apartaron de los principios ideológicos de este movimiento y votaron a favor de las tesis gubernamentales que limitan derechos y retroceden en varios aspectos relacionados con la soberanía nacional, lo laboral o la protección de los territorios, entre otros aspectos.
Decisiones como la aprobación de bases militares extranjeras en territorio nacional, la flexibilidad para despidos intempestivos, la posibilidad de privatización de áreas protegidas, la vigilancia digital ilegal y las facultades para incluso violar la privacidad de domicilios sin orden de juez competente, son algunas de las resoluciones aprobadas por los asambleístas cuestionados en cuerpos legales viciados de inconstitucionalidad. Estas resoluciones aprobadas en menos de dos meses echan a la basura conquistas sociales logradas en más de 30 años de luchas sociales.
Algunas intervenciones, especialmente por parte de sectores alegados a los asambleístas en cuestión, hacían llamados a la unidad y que, si bien aceptaban que se los podía sancionar, la expulsión no era una opción; algunas de estas intervenciones hablaron incluso de que no es competencia de la CONAIE evaluar la actuación de los asambleístas.
Al momento de votar se pudo constatar que tanto la gente que estaba a favor de Leónidas Iza, así como mucha gente que estaba en su contra, votaron por la expulsión; es decir, hicieron público un sentimiento de indignación frente al proceder de los asambleístas de Pachakutik.
Como complemento de esta resolución, se pidió que el Comité de Ética de Pachakutik continúe con el proceso y concrete la expulsión. En algunos sectores aún persiste la confusión respecto a la relación existente entre Pachakutik y la CONAIE. Diversos liderazgos históricos de esta organización indígena recordaron que Pachakutik fue creado como brazo político de la CONAIE. “CONAIE es la madre y Pachakutik es el hijo, por tanto, el hijo debe obediencia a la madre”, dijeron.
Así, en dos votaciones seguidas ganó ampliamente las tesis lideradas por Leónidas Iza, pero faltaba una tercera: ¿el estatuto ratificado entra en vigencia inmediatamente o en el nuevo congreso y en las nuevas elecciones después de ésta?
Evidentemente este debate constituía un nuevo intento de bloquear la reelección de Leónidas Iza, pero también fracasó y el Congreso decidió que los estatutos modificados entraban en vigencia inmediatamente y aseguraron que no necesitaban de la aprobación, ni el registro, en ningún ente estatal o del gobierno central.
En tres votaciones seguidas ganó las propuestas de Leónidas Iza; esto hacía prever que no era muy baja la posibilidad de que pueda perder las elecciones, más aún cuando las 64 resoluciones tomadas por el Congreso y que se constituyen en el mandato para el nuevo Consejo de Gobierno de la CONAIE, estaban en la dirección ideológica propuesta por Leónidas Iza a lo largo de todo su liderazgo, orientadas a proteger los derechos de los pueblos indígenas, los derechos de la naturaleza y exigir el diseño de política pública que beneficie a las clases sociales más desfavorecidas, sean o no sean indígenas.
El correísmo pasó factura
A la hora de la verdad las candidaturas del gobierno no se presentaron y pasaron a la contienda únicamente dos candidatos: Leónidas Iza y Marlon Vargas.
Se había consolidado una nueva correlación de fuerzas, juntando a quienes se oponían a la reelección de Leónidas Iza. Un primer aviso de esta nueva realidad se observó durante las intervenciones de los candidatos previo a la votación, pues los aplausos a Leónidas Iza disminuyeron considerablemente con relación a sus anteriores intervenciones.
Quizá las dos últimas intervenciones se radicalizaron demasiado, pensando que tenía asegurado el triunfo, y propició que las negociaciones políticas para la elección del nuevo presidente de la CONAIE logren unir a grandes sectores de la sierra en torno de la candidatura de Marlon Vargas, mediante el desistimiento de las candidaturas abiertamente gobiernistas.
Un negociador bastante experimentado en el mundo indígena, que se constituyó en el enlace entre las organizaciones de la amazonía y la sierra, aseguró que el primer error político de Leónidas Iza fue el acuerdo con la Revolución Ciudadana para apoyar la candidatura presidencial de Luisa Gonzáles. Sin ese acuerdo no se habría dado ningún debate que impidiera su reelección, pues son evidentes los avances logrados en su administración de la CONAIE, expresados no solo en obras físicas y la posición política de esta organización, sino también en su propia proyección como líder nacional. Al final, la alianza con la Revolución Ciudadana le pasó factura a pesar de que, políticamente, no esté vinculado con la RC.
¿Qué se espera?
Los criterios generales luego del triunfo de Marlon Vargas fueron que, al menos, es el menos malo de entre las candidaturas que se oponían a Leónidas Iza; sin embargo, no hay certeza sobre cuál será el rumbo político que impregne en la CONAIE, más aún cuando en la conformación del nuevo consejo de gobierno se encuentran personas directamente vinculadas con el gobierno de Daniel Noboa, como el caso de la vicepresidenta electa, Ercilia Castañeda; o con las grandes ONGs ambientalistas, como Nemo Guiquita, que se encargará de las relaciones internacionales.
Lo que queda son las 64 resoluciones que deberán ser aplicadas por el nuevo Consejo de Gobierno y la implementación práctica del estatuto reformado. ¿Marlon Vargas tendrá el valor de disputar el poder a las estructuras coloniales que aún persisten en el Estado? ¿Tendrá la voluntad de implementar esa nueva arquitectura económica que ponga en cintura a las grandes ONGs y las obligue a entrar en una planificación general para el uso de la cooperación? El tiempo lo dirá.
[1] https://lalineadefuego.info/el-octavo-congreso-de-la-conaie-una-vision-critica-luis-angel-saavedra/