Por: Germán Castañeda
Kichwa Otavalo
Noviembre 16 de 2018
Para algunos, las palabras no son más que sonidos que emergen de su boca; sin embargo para otros representan el significado de su vida misma, su honor, su honra, su valor como seres humanos. La palabra como tal le da un significado a la existencia del hombre. Pero, qué significa tener la palabra?. Es tener palabra de honor, es hablar con la verdad. La palabra dice mucho sobre la seriedad, honestidad y sinceridad de una persona.
“Le doy mi palabra” es una expresión utilizada cuando se quiere asumir una responsabilidad o cerrar un acuerdo, la garantía es la palabra, entrega de un símbolo de honestidad y buena intención que es apenas la voz y que queda comprometido a cumplir. De esa manera han convivido mis abuelos, nuestros padres antes de someterse a cumplir documentos escritos que hoy en día ni eso no se da cumplimiento. Para demostrar el valor de la palabra solamente un ejemplo que hasta ahora se practica en las comunas indígenas del pueblo kichwa Otavalo que es el palabray; una de las ceremonias del matrimonio indígena según la tradición ancestral que se ha venido practicando en las comunas de la cuenca del lago san Pablo; el mismo consiste que antes del matrimonio civil y eclesiástico; las autoridades indígenas de la comuna, en coordinación con los padres de los novios, dirigido por un maestro de ceremonia quien es el testigo de honor del matrimonio indígena; dicha ceremonia, antes de la obligatoriedad del matrimonio en civil y eclesiástico tenía el mismo valor que ahora; sin embargo ahora ni se le toma en cuenta por que al nacer los hijos hay que registrar con nombres y apellidos y deben tener un número de registro y esto hace que nuestras formas de convivencia social se han tergiversado y ahora los indígenas podemos casarnos una o varias veces y divorciarnos según las conveniencias, he ahí nuestra debilidad cultural, he ahí la imposición de las leyes e instituciones del Estado sobre nuestras formas de convivencia.
La palabra es la expresión de los recursos que las diversas culturas que usamos para llamar las cosas. Esta nominación no es arbitraria, pues esconde la historia, el recorrido, la manera de ver el mundo de una sociedad. De ahí que las palabras sean fundamentales para entender la realidad. Las palabras que usamos dan cuenta también de cómo somos, de nuestra manera particular e individual de ver el mundo. Son testimonio de nuestra historia personal y de cómo esa historia se ha ido articulando a lo largo de generaciones con otras historias y otras realidades. Por ejemplo, las palabras que se usan para referirse a las mujeres o diversos grupos étnicos y sus realidades expresan cómo vemos el mundo, cómo nos han educado, cuánto de violentos hay en nosotros. Y las palabras, aunque no sean soeces o violentas en sí, expresan mucho; sin embargo podemos decir que la palabra, está pasando de moda con la globalización y la tecnología, me refiero a que cada uno de nosotros, en la familia ya no conversamos con los miembros de la familia; los niños y jóvenes manejan mejor la tecnología que sus padres y al momento de la reunión familiar cada miembro está en con su celular en el chateo, creo que en este momento es el cáncer tecnológico que no tenemos remedio alguno.