Por: Bernardo Chango
Kichwa del Pueblo Salasaca
10 de agosto de 2018
A lo largo de la historia ecuatoriana la educación de los pueblos ancestrales ha continuado con sus dificultades y durante cada época de la evolución de la sociedad; dificultades de aspectos económicos, políticos, sociales y culturales. Con liderazgo y/o dirección de los propios pueblos ancestrales, de las ONGs o de los organismos estatales. Para mantener su identidad cultural, de catequizar, de cristianizar, dominar o exterminar unificaando en la lengua dominante. Aplicando distintos modelos lingüísticos de transición o de mantenimiento, que responde a los fines de los dueños de los poderes políticos y económicos.
En el Ecuador, la educación de los pueblos ancestrales inició en la clandestinidad, impulsadas por personas convencidas de que su identidad cultural, los saberes y su lengua se perennicen de generación en generación.
La educación de los pueblos ancestrales a lo largo de la historia, desde la invasión europea ha sido prohibida o restringida por los poderes centrales. Por un lado han desvalorado al considerar los idiomas indígenas como no apto para la educación, por lo tanto no han considerado para este proceso educativo. Por otro lado, han considerado como un idioma solamente oral y no escrito. Estos criterios han llevado a las autoridades educativos a no apoyar a la difusión y revitalización de las lenguas ancestrales, lo que ha llevado a que los propios docentes de la cultura blanca mestiza se opongan el funcionamiento de la educación de los pueblos ancestrales.
En su mayor parte el proceso educativo de los pueblos ancestrales en la historia ecuatoriana se ha desarrollado en español, utilizando la lengua kichwa como un área de estudio. Los contenidos educativos en su mayor parte son de la cultura blanco mestiza, gran parte de los docentes son blanco mestizos y los pocos docentes runas preparados en el proceso educativo blanco mestizo, de los cuales, se han logrado reivindicar con su identidad cultural.
También se ha dado el proceso educativo de los pueblos ancestrales con identidad cultural como la impulsada en Cayambe con Dolores Cacuango, que era en su propia lengua materna, utilizó los contenido de los saberes de su propia cultura.
De todo esto, se puede concluir que es posible que un proceso educativo se realice en cualquier idioma, se puede tratar los contenidos de su propia cultura y con docentes comprometidos con la causa de los pueblos ancestrales.
Por otro lado, es necesario reconsiderar que el proceso educativo debe salir de una educación de traducción o la educación blanca mestiza, que tiene como política lingüística de llevar al monolingüismo español, solo con el nombre de educación intercultural bilingüe. Las lenguas ancestrales son consideradas como un área de estudio y el idioma del proceso educativo es el español.
Para ello es necesario que en el Ecuador tengamos una recta educativa completa, iniciando desde Educación Infantil, Familiar Comunitaria, finalizando con la Educación Superior, donde el proceso educativo sea en la lengua materna y el español un área de estudio. Porque es factible el aprendizaje del español por emersión, como es conocimiento de todos, que el medio de comunicación personal, familiar, social y los medios de comunicación utilizan este idioma.
Por lo tanto, es una necesidad urgente el replantear la política de educación intercultural, contar con una política lingüística, para nuestro país que es intercultural, plurinacional y multilingüe, y revitalizar la lengua y la cultura a través de todos los medios de comunicación en igualdad de condiciones que el español. Solo de esta manera podemos revitalizar y difundir la lengua y cultura de los pueblos ancestrales.